La educación actual está dirigida a potenciar las diversas habilidades y aptitudes de los estudiantes dentro y fuera del aula. En el colegio Aguascalientes trabajamos a partir de metodologías que vinculan el aprendizaje de contenidos con su aplicación directa en la vida cotidiana de los estudiantes para que estos aprendan de manera práctica y colaborativa.
A diferencia de los modelos educativos tradicionales, hoy en día se utilizan metodologías de aprendizaje en las que los alumnos son involucrados en situaciones reales donde pueden aplicar los conocimientos de clase. De igual modo, se busca que el estudiante sea capaz de trabajar en conjunto con otros compañeros hacia un fin común como parte de un aprendizaje cooperativo.
Este enfoque educativo que privilegia el trabajo en equipo y la colaboración entre pares para llegar a un objetivo que beneficie a todos los involucrados, se ha implementado en muchas instituciones educativas para generar en los estudiantes el hábito de la cooperación para la resolución de problemas actuales.
En este artículo te explicamos las principales propiedades del aprendizaje cooperativo para que conozcas más sobre esta metodología.
Tabla de contenidos
¿Qué es el aprendizaje cooperativo?
El aprendizaje cooperativo es una metodología educativa en la que los estudiantes trabajan en pequeños o grandes grupos para lograr objetivos comunes. En este tipo de trabajo grupal, los mismos alumnos delegan tareas y roles al interior del equipo y se responsabilizan por alcanzar las metas propuestas de manera colectiva.
A diferencia del aprendizaje colaborativo, que puede implementarse de forma esporádica e informal, el aprendizaje cooperativo suele ser estructurado por el docente a partir de la planificación de proyectos o actividades complementarias con un peso específico en la evaluación final de los estudiantes.
1.- Interdependencia positiva
Al aplicar el docente actividades que requieran del trabajo cooperativo, los estudiantes perciben que su éxito individual está ligado al éxito del grupo. Por ende, cada miembro depende de los demás para alcanzar los objetivos y lograr beneficios en el proceso y en el resultado final. Esto hace que todos los involucrados se responsabilicen por su parte del trabajo.
Cuando el docente enfatiza la importancia del proyecto o actividad en equipos se fomenta en los alumnos la cooperación y el sentido de responsabilidad compartida, pues el esfuerzo de cada miembro traerá consecuencias positivas para el grupo, mismas que tendrán un impacto directo en la calificación individual del curso.
2.- Interacción entre pares
Al establecer los roles y tareas para cada miembro, los estudiantes se comunican directamente, y también, se ayudan mutuamente en el proceso de aprendizaje con el fin de alcanzar las metas establecidas.
Esta interacción permite que el alumno desarrolle habilidades como el diálogo, la mediación y la argumentación al compartir ideas y organizar el trabajo en equipo.
Cabe destacar también que el trabajo cooperativo mejora la comprensión de los estudiantes a través del intercambio de ideas y la explicación de conceptos, lo cual fortalece la interacción social y académica.
3.- Responsabilidad individual y grupal
En el proceso del trabajo cooperativo cada estudiante es responsable de su propio aprendizaje y del éxito del grupo. Esto implica que el desempeño individual es evaluado y medido en tanto contribuye al resultado colectivo. Lo anterior conlleva a que el alumno se concientice de su rol y la manera en que contribuye o afecta al desempeño de todo el equipo.
De este modo, el trabajo cooperativo garantiza que todos los miembros participen activamente y que el grupo no dependa de unos pocos para completar las tareas. A la par del trabajo de los estudiantes, el docente tiene que ofrecer orientación y retroalimentación constante para evaluar el desempeño del grupo y de cada miembro.
4.- Desarrollo de habilidades individuales y en grupo
Cuando esta metodología se ejecuta de forma efectiva y constante, los estudiantes pueden desarrollar habilidades sociales como la comunicación, la toma de decisiones, resolución de conflictos y gestión del tiempo, mismas que les serán de gran ayuda los siguientes niveles académicos, donde cada vez será más importante el aprendizaje autónomo y colaborativo.
5.- Procesamiento grupal y autoevaluación
Al trabajar de forma activa en un ambiente regulado, el grupo es capaz de analizar y reflexionar sobre sus logros o fallos, al mismo tiempo que planifica cómo mejorar su trabajo conjunto.
Estos elementos promueven la autoevaluación y la mejora continua, asegurando que el grupo siga siendo eficiente y tenga un aprovechamiento satisfactorio.
6.- Simultaneidad de objetivos
Durante el proceso de trabajo los estudiantes deben ser conscientes de que persiguen objetivos académicos y sociales simultáneamente, integrando el aprendizaje de contenido con el desarrollo de habilidades interpersonales. El docente debe enfatizar la importancia de la actividad o proyecto para su calificación personal en todo momento.
Al implementar esta metodología de aprendizaje cooperativo los alumnos suelen alcanzar niveles más altos de rendimiento académico al trabajar juntos y ayudarse mutuamente. También, este enfoque fomenta la comunicación, empatía y cooperación y otras habilidades esenciales entre el grupo, las cuales les serán de gran utilidad para la vida académica, profesional y personal.
Como éste, existen otros métodos que fortalecen el rendimiento académico y personal de los estudiantes, visita nuestro blog y conócelos.